martes, 6 de octubre de 2020

 .

Hoy no habría motivo alguno para simplemente escribir...
Debería existir una razón poderosa para hacerlo y, así, poder llegar hasta tus ojos con la vehemencia suficiente y la certeza necesaria para ser en tus días, para hacer de tus días y no con ello trocar tus noches... las mismas que hoy no dejan llegar el día.

Hoy, no habría motivo alguno para simplemente estar...
Y entender con ello que ocupas ese lugar en el espacio-tiempo donde se haría claramente tu voluntad, donde ejercería la fiereza de tu cariño o donde predominara más que la simple presencia... la misma que hace tanta falta.

Hoy, no habría motivo alguno para simplemente cantar...
El encontrar la nota idónea que, reflexiva, acuda hasta tu entender y hagas con ella la cadencia adecuada que nos enseñe a todos del canto mismo del viento mientras alzas tu vuelo... ese mismo que hoy se niega.

Hoy, no habría motivo alguno para simplemente meditar...
Buscar en el entredicho lo que alguna vez sugeriste y que nos orilló a todos y cada uno de quienes te supimos a caminar con tu enseñanza y tu pregón... ése mismo que hoy calla.

Hoy, no habría motivo alguno para simplemente "sentarse" en el laberinto...
No lo habría pues, aunque estuviese fuera de él, seguiríamos sintiendo que seguimos inmersos y, con ello, lamentar nuestra situación actual al sabernos aún mortales.


Hoy, no hubiese escrito, hablado, cantado, meditado o alzado el vuelo hacia tu encuentro pues, sé con certeza, que no estarás aquí hurgando tratando de encontrar una fecha representativa, un momento álgido, una frase que te evoque o cualquier nota que se asemeje un tanto a lo que tú elegiste alguna vez para, desde ahí, partir hacia el rumbo de vida que siempre te trazaste.

Hoy, es por demás el intentar "buscar la luz"... pues carecerá de su presencia conmigo o en mis grafías.
Sé, pues, el lugar donde estás y estarás siempre. Aquel donde elegiste "al final", ese que ninguno de nosotros conoce y que pudiera resultarnos "familiar"... mas, aunque queramos, sólo es tuyo y lo será a partir del momento justo de tu partida.

Hoy, y siempre, para ti... aún sin fecha, aún sin nombre, sin nota, sin texto siquiera.

Q.D.E.P.
Luzanna Andreani Ruiz.